Se que puede decirse más fácil que vivirse. En especial cuando tu cuerpo no puede ni cargarse a sí mismo, cuando las emociones están a flor de piel, cuando descubres que nada será como antes- que ya eres otra… Pero estoy convencida de que es verdad, que podemos ofrecer nuestro dolor por otros, que quizá no lo entendamos pero tiene un sentido infinito, que tendrá eco, como el aire huracanado que aletean las mariposas; ese que aunque a veces por su pequeño tamaño se esconde de nuestros ojos, todo lo mueve.
Y este dolor no tiene por qué ser vivido en solitario, para eso estamos aquí, para junt@s ser más fuertes, para que el mundo cambie cuando alzamos al Cielo esa ofrenda tan padecida, complicada, incomprendida, incluso rechazada -en una locura de amor. #vivirconlupusblog